¿Qué es una hipoteca?
Una hipoteca es un inmueble que actúa como garantía del pago de un crédito. Es decir, que si en un momento dado no podemos pagar la deuda en el plazo estipulado el prestamista puede ponerlo en venta.
La hipoteca está formada por el capital o el dinero que se prestó mediante un crédito, el plazo de devolución del préstamo y el tipo de interés, siendo este último un porcentaje que se suma a la cantidad que hemos de pagar y que se traduce en beneficios para el acreedor. Este interés puede ser fijo, cuando no varía, y variable, cuando sí que lo hace.
¿Y un préstamo hipotecario?
El préstamo hipotecario es un producto bancario que consiste en un préstamo de dinero que una entidad (normalmente un banco) hace a un particular o una empresa. Mediante la firma del contrato, el prestatario se compromete a devolver la cantidad prestada junto con unos intereses concretos en unas cuotas o pagos periódicos ya fijados.
Todos los préstamos tienen también una garantía en caso de que no paguemos la deuda. Por ello, en caso de impago el banco puede hacer que se venda el inmueble hipotecado (habitualmente una vivienda) para recuperar la cantidad pendiente de cobro. Según lo que se haya estipulado en el contrato con la entidad, puede haber una ejecución judicial o una ejecución extrajudicial de la hipoteca.
La ejecución judicial consiste en que la entidad pondrá el inmueble hipotecado a la venta, mientras que la ejecución extrajudicial implicaría que la entidad bancaria pondrá a la venta el inmueble hipotecado mediante la intervención de notario, y en la que no habría un procedimiento judicial.
Formas de devolver el préstamo
Podemos devolver un préstamo hipotecario de varias maneras, dependiendo de la periodicidad de con que paguemos las cuotas y de si los intereses varían o no a lo largo del plazo acordado con el banco. También es posible establecer un período inicial de carencia, durante el que sólo tendremos que pagar los intereses, o, incluso, durante el que no tendremos que pagar nada.
Aun así, lo más frecuente es el llamado “sistema francés”. Este sistema consiste en la devolución del préstamo mediante el pago de cuotas periódicas constantes, pudiendo ser mensuales, por lo general. La cantidad pagada estará formada por los intereses y el capital.
Diferencia entre hipoteca y préstamo hipotecario
Podemos concluir diciendo que la diferencia entre hipoteca y préstamo hipotecario radicaría en que el préstamo hipotecario sería la deuda y la hipoteca la garantía de la devolución de ésta al banco.