¿Qué diferencia a la banca cooperativa de la tradicional?

Con el término de Banca Cooperativa se puede hacer referencia tanto a las sociedades cooperativas de crédito como a los bancos cooperativos centrales y otras entidades financieras que son promovidas y dirigidas por las cooperativas de crédito.

Características

La banca cooperativa es una modalidad de banca bastante diferente a lo que conocemos como banca tradicional, tanto en lo que se refiere a su composición como a su actividad y su función en el contexto económico actual.

Bajo el nombre de Banca Cooperativa puede venirnos a la cabeza la imagen de una banca alternativa, con un modo distinto de trabajar que la banca corriente comercial, y por ello, podemos llegar a pensar que se trata en su mayoría de empresas con poco poder y con dificultades económicas. Contrariamente a lo que podamos imaginar, existen cooperativas de crédito en distintos países que han ido juntándose con el tiempo, dando lugar a sistemas o grupos de banca cooperativa, dando lugar a estructuras empresariales importantes y fuertes, equiparables a otros grupos financieros considerados normales.

Los rasgos que diferencian a las entidades cooperativas de las tradicionales son:

• El arraigo y los lazos y la afinidad con el lugar o el sector de origen de cada cooperativa de crédito.
• Un profundo conocimiento del medio donde tiene lugar su actuación y de los sectores económicos a los que pertenecen sus clientes y sus socios, como ocurre con las cooperativas de crédito que se dedican al sector agropecuario, a la industria alimentaria, a determinados grupos o colectivos, al sector textil, al sector inmobiliario, etc.
• Su actividad se considera una forma de apoyo a su cliente o su socio en sus distintas decisiones económicas o financieras, caracterizándose por ofrecer un servicio y un tratamiento cercano y comprensivo, asesorando al cliente en sus actividades y preocupándose por conocer y especializarse en un sector profesional y las circunstancias del cliente. Como consecuencia, la banca cooperativa acaba creando una relación de confianza con el cliente, dando lugar a una fidelización de los mismos.
• Por último, la cooperativa de crédito procura actualizarse implementando las innovaciones técnicas necesarias para mantener su servicio al día y diferenciarlo de la competencia. También puede participar en tareas de investigación y desarrollo de las empresas con las que trabaja y con los sectores de los que proceden sus clientes.

Por tanto, los rasgos más característicos que definen la banca cooperativa son la proximidad con el cliente, la especialización en un sector de la economía, el conocimiento de cada cliente y su contexto, el apoyo en las actividades de éste y su vinculación y relación directa con el entorno en el que se encuentra. Por todas estas razones, son muchos los clientes que confían en estas entidades para sus actividades bancarias y financieras.