Los fondos índice
Los fondos índice son un tipo de fondo de inversión de renta variable que buscan reproducir el comportamiento de un índice bursátil determinado. Con ello, se pretende llegar a igualar o superar la rentabilidad de dicho índice.
Para construir un fondo índice, por tanto, habrá que comprar todas las acciones que componen un índice bursátil concreto y con la misma ponderación, consiguiéndose así la misma rentabilidad que el índice en cuestión. Hay que tener presenta, aun así, que los índices bursátiles no expresan los dividendos que las empresas pagarán en caso de obtener beneficios, por lo que la rentabilidad de los fondos índice, en realidad, no es tan alta como se puede pensar inicialmente, siendo en realidad más baja que la rentabilidad de una inversión directa en la bolsa de valores.
Ventajas e inconvenientes
Las principales ventajas de los fondos índice son sus bajas comisiones y la seguridad de que con ellos obtendremos una rentabilidad similar a la del índice bursátil que reproducen. Esto conlleva que no tengamos que depender de un gestor o a un intermediario para intentar superar al índice o que no debamos pagar una serie de comisiones y tasas por un equipo que controle y maneje nuestras inversiones.
No obstante, han surgido algunos estudios que sugieren que los fondos índices no son tan rentables como parece, pues en pocas ocasiones consiguen llegan a ser iguales o superiores que los índices de referencia, aunque también existen investigaciones que ponen en evidencia que hay casos en los que sí que se ha conseguido. Esta polémica hace que su reputación no sea tan buena como la de otros activos financieros y que haya inversores que no quieran arriesgarse.
Diferencias entre fondo cotizado y fondo índice
El fondo cotizado y el fondo índice pueden parecer similares, sin embargo, existen algunos rasgos que los diferencian, a pesar de que ambos fondos persiguen la réplica de un índice bursátil.
La principal diferencia entre estos fondos es el hecho de que los fondos cotizados se pueden negociar a lo largo de la sesión de la bolsa las veces que se desee, mientras que los fondos índice se pueden negociar solamente en el cierre del mercado, como pasa con el resto de los fondos de inversión. Además, los fondos cotizados son más rentables que los fondos índice.
Sin embargo, como ya se ha dicho en el artículo sobre las ETFs, los fondos cotizados presentan una fiscalidad bastante menos favorable que la de los fondos índice.